7.02.2013

Vampyros Lesbos: Sexadelic Dance Party


La gente que durante el franquismo conseguía ver una película de Jesús Franco en España debía hacerlo, como norma, después de que los huesudos dedos de los censores españoles, paradigma de mojigatería cultural, cortasen, recortasen y pegasen a su antojo las escenas que consideraban inadecuadas. No he visto la versión censurada, pero me juego mi exigua carne a que esto que viene a continuación no estaba incluido en ella:



La película (en su versión extendida) se abre con esta escena. La hermosa Soledad Miranda, musa a la sazón de Jess Franco, bailando libidinosamente con un, también hermoso, transunto de maniquí. La melodía con la que las mujeres traveseaban en el suelo es un chorrazo de psicodelia setentera de la mejor calidad imaginable. No en vano, una de las razones del redescubrimiento de esta película residió en su banda sonora. Ojo, no es una coas mía, lo dijo el propio Jesús Franco. En 1995 el sello alemán Crippled Dick Hot Wax! edita Vampyros Lesbos: Sexadelic Dance Party, la banda sonora original de la película (en España el nombre original de la película, Vampyros Lesbos, quedó ridículamente reducido a Las Vampiras; cosas, otra vez, de la censura). 
He leído en algunos sitios que Jess Franco participó en la composición de las canciones, sin embargo los títulos de crédito dan la autoría de la composición y de los arreglos a Manfred Hübler y Siegfried Schwab. Del primero la información es escasa. La base de datos de Discogs sólo recoge su participación en las bandas sonoras de la películas de Franco. Los datos son mucho más abundantes para el segundo. La Wikipedia describe a Schwab como un músico de jazz alemán (ambos son, de hecho, germanos) que ha participado en más de 15.000 (¡!) grabaciones de cine, televisión y para discos de terceros.
El álbum a en sí se desarrolla a su antojo bajo brochazos de infinitos estilos musicales: desde el soul, hasta el funk, el groove, el rock prog y psicodelia a gogó; psicodelia por un tubo (escuchen sino The Message, el "chorrazo de psicodelia" del que hablábamos antes). Es cierto que es difícil unificar todos estos estilos bajo un mismo título y salir airoso de la aventura, pero creo que aquí se ha conseguido. 
Así que, aunque sea un sacrilegio intentar emular a la bella Soledad, pueden intentarlo. Para ello dejo el link de descarga en los comentarios.